Desde que comenzó la expansión del ferrocarril en España empezaron estudios para su llegada al Campo de Gibraltar buscando el interés de los ingleses por la colonia de Gibraltar y el comercio de los vinos jerezanos.
Según se publicó en la Gaceta de los Caminos de Hierro en 1860 se presentó un proyecto de Cayetano Bordoy para unir Algeciras y La Línea con el ferrocarril Cádiz - Sevilla en las cercanías de Jerez. En 1876 se presenta otro proyecto por la empresa E.S. Balignac.
Un grupo de comerciantes ingleses inició en 1875 las gestiones para construir un ferrocarril que uniera el Campo de Gibraltar con la línea Sevilla - Cádiz a la altura de Jerez. La proposición de ley se presentó al Congreso en 1878 por el diputado algecireño Antonio Ruiz Tagle en su nombre y en el de seis diputados más. Con un vocabulario bastante retórico argumentaba que sería de utilidad al recorrer una zona rica pero falta de caminos y que permitiría unir la bahía de Algeciras con el interior de España. El carácter internacional de la vía y su importancia estratégica justificaba una subvención de 60.000 pesetas por kilómetro por parte del Estado. Sería aproximadamente la cuarta parte del coste de la línea.
Fue aprobada en agosto de 1879. La aprobación consistió en el cambio del trazado Cádiz - Campamento, el cual se encontraba sin actividad por falta de fondos por uno nuevo entre Jerez y Algeciras. Pasaría por San Roque, Jimena, Algar y Arcos con idea de favorecer la agricultura, riqueza forestal y minera de la zona.
Ya en 1875 los periódicos españoles y británicos informaban de la constitución de la compañía y evaluaba la obra en 200 millones de reales. Detallaba que la estación de La Línea se situaría al norte, en linea recta con la calle San Pablo, con intención de que los viajeros llegaran por el centro de la localidad.
Incluso aparece información en el diario jerezano El Guadalete de que en Puerto Gáliz se encontraba la comisión de ingenieros que estaba realizando el proyecto. Al mismo tiempo en Algeciras se hacían gestiones para que un ramal llegara hasta esa ciudad.
El proyecto inicial recogía que la línea partiría del kilómetro 99 de la línea Sevilla - Cádiz, cerca de Jerez, para pasar por Aros, Algar, Tempul, Puerto de Gáliz, Jimena, Castellar, San Roque, Torre Bocadillo (antigua Carteia) y empalmar allí con la de San Fernando a Algeciras y La Línea.
En 1876 el diario El Comercio recogía la noticia de que “a la vista del contrato de la empresa de esta nueva vía férrea con los municipios de las seis poblaciones del trayecto, que son La Línea, San Roque, Jimena, Algar, Castellar y Arcos; proponía un trazado alternativo que, atravesando campiñas entre los términos de Alcalá y Medina, enlazase pueblos importantes y permitiese comunicarse algún día con Chiclana y San Fernando. Añadía que esta reforma modificaba ventajosamente el proyecto, enlazando más puntos productivos al Campo de Gibraltar, necesitado de acercarse a los centros agrícolas y mercantiles.
En octubre de 1876 el periódico El Último Telegrama de Algeciras aseguraba que en breve empezarían los trabajos desde la Atunara, en La Línea de la Concepción. En septiembre de 1877 el diario madrileño El Globo hablaba de la presencia de delegados franceses e ingleses para tratar la construcción.
Pese a la exitosa presentación del proyecto en Madrid y el apoyo del presidente de la comisión del ferrocarril, Emilio Castelar, la prensa especializada calificó negativamente el proyecto. El Congreso tampoco apoyó la propuesta y sólo hay una referencia en las actas de la cámara diciendo que la proposición de ley de Ruiz Tagle no había sido aprobada debiendo la empresa buscar otra financiación.
En 1879 el gobierno aprueba la transferencia de la concesión de la línea a los mismos del ferrocarril de Cádiz a Campamento. A partir de ahí vuelven a aparecer noticias en la prensa nacional referentes al proyecto y a la inmediatez del comienzo de los trabajos. El periódico La Época concretaba que “dentro de un mes empezarán en grande escala, y en cuatro puntos distintos, los trabajos del ferro-carril de Jerez a Algeciras, cuyos fondos facilitará el Crédito Lyones”.
En 1880 se constituyó la Compañía del Ferrocarril de Jerez a Algeciras y Gibraltar iniciando los trabajos el mismo año. En 1885 ya se había agotado el capital con las obras realizadas entre Algeciras y Jimena por lo que se desistió de continuar hasta Jerez cambiando por la idea de seguir hasta Ronda y de allí a Bobadilla.
Tren compuesto remolcando vagones cargados de carbón por el puerto de Algeciras. Foto: años 30 del siglo XX, sin datos de su autor. (Grupo el Ferrocarril en Andalucía)
A mediados de 1880 el ministro de Fomento presenta a las Cortes un proyecto de ley para el cambio de trazado del ferrocarril a Cádiz y Campamento, argumentando las ventajas desde los puntos de vista militar, comercial y económico del nuevo trazado por el interior de la provincia favoreciendo a mayor número de habitantes. El Ministerio de Guerra también aprobaba el cambio por ser más fácil la defensa de su trazado. Fue aprobado por la comisión encargada reduciendo la subvención en proporción a los kilómetros construidos. El debate fue intenso aduciéndose motivos personales e incluso la reclamación sobre la soberanía española de Gibraltar.
Esta decisión provocó las protestas del ayuntamiento de Ronda, que defendía el trazado Algeciras - Bobadilla. El diputado algecireño José González de la Vega también manifestó su oposición al anular el trayecto que beneficiaba a Cádiz, San Fernando, Chiclana, Conil, Alcalá, Vejer y Tarifa. Es curiosa la respuesta que se dio por parte de la comisión afirmando que eran pueblos pequeños que no podían suministrar productos suficientes para el tráfico. Siglo y medio después esas palabras no serían las mismas.
Durante 1881 se suceden noticias dispares en cuanto al interés de la compañía por llevar adelante las obras y por otra parte los informes de la comisión para el trazado hasta Jimena comprendido en zona militar. En octubre el ministerio de la Guerra comunica a Fomento la suspensión de los estudios por falta de recursos.
El año 1882 está repleto de noticias en la prensa sobre el avance de los trabajos de replanteo, expropiación, suministro y transporte de material hasta la playa de Guadarranque.
Fragmento de mapa de la línea Algeciras - Bobadilla de 1887 donde se observa el proyecto abandonado por el interior de la provincia.
Durante 1883 se construyeron los puentes sobre los ríos Palmones y Guadarranque, y empezaron las obras de la estación de Algeciras. Se avanzaron los trabajos entre Algeciras y el Guadarranque. También se desembarcó en Algeciras y Gibraltar material para el tendido de la línea férrea. Todo esto sin que aún estuviera aprobado el trazado definitivo.
En 1884 se aprobó definitivamente el trazado de la primera sección (Jerez - Tempul), la tercera (Jimena - río Guadarranque) y cuarta (río Guadarranque - Algeciras). Las obras no se reanudaron por problemas financieros, habiéndose explanado 17 kilómetros y realizado obras menores.
Inconcreciones, retrasos y escasez de avances hicieron depreciar en bolsa las obligaciones del ferrocarril teniendo que pedir la compañía a la administración española la entrega del anticipo reintegrable que la construcción del ferrocarril tenía concedido. Esto no fue aprobado y en 1885 se desiste de la construcción de la vía a Jerez optando por la de Ronda hacia Bobadilla, lo que fue aprobado por el Congreso en 1887.
Tren pasando bajo el acueducto de Algeciras
La llegada del ferrocarril en 1892 a través de esta línea, la inauguración al año siguiente del muelle de madera y las mejoras viarias hacia Tarifa hicieron que Algeciras viviera un período de desarrollo. La ciudad se extiende hacia el sur con la construcción de hoteles de lujo y chalets. Existe más información sobre el ferrocarril hacia Bobadilla y los beneficios para Algeciras, pero ya se sale del tema centrado en la Bahía de Cádiz.
Un trabajo denominado “Memoria” de Amalio Saiz de Bustamente publicado en 1928 se extiende sobre este proyecto ferroviario e incluye un mapa en el que se aparece con la anotación de “caducado” un trazado que partiría de Jerez hacia Jimena pasando por San José del Valle. De este mapa se deduce que el trazado seguiría desde El Valle hacia Alcalá de los Gazules y de ahí hacia Jimena por Patrite por lo que se conoce hoy como “Ruta de los Quintos”. Es el camino que tenían que hacían andando los jovenes “quintos” desde Jimena para inscribirse a Cádiz para hacer el servicio militar. El lugar aparece nombrado como Patrite, Patriste, Partiste o Paz Triste. Según se dice se refiere a un acuerdo de paz firmado en su día con los moros. Recordemos que estamos en un antiguo territorio de frontera. Se puede apreciar que este recorrido, con continuidad hacia Sanlúcar desde Jerez hubiera supuesto una vertebración aún hoy no conseguida de la provincia de Cádiz en un eje este-oeste.