El puente de San Alejandro cruzaba el río Guadalete justo después de la estación de El Puerto de Santa Maria en dirección a Cádiz. Es uno de los restos que quedan de la primera línea de ferrocarril en Andalucía: Jerez - Trocadero. Por él circularon innumerables botas de vino de Jerez para su exportación. Fue construido en 1860 por el ingeniero Luis Torres Vildósola, padre del famoso Leonardo Torres Quevedo.
Nacido en Cantabria en 1852 y fallecido en Madrid en 1936. Ingeniero de caminos, matemático e inventor. Mejoró los diseños de los dirigibles, realizó transbordadores aéreos así como funiculares y teleféricos no sólo en España. Le dio fama mundial la construcción del transbordador sobre las cataratas del Niágara. Incluso realizó trabajos de radiocontrol y máquinas de cálculo analógicas. Se le atribuye particiipación en los primeros pasos hacia la Informática.
Su ubicación era el punto kilométrico 124,47 de la línea Sevilla - Cádiz. Constaba de cuatro tramos con un toral de 147 metros de longitud.
La construcción del nuevo trazado ferroviario con doble vía, paralelas a su ubicación, le dejaron en desuso en 2006 y fue desmontado parcialmente.
Parecía que su destino iba a ser la chatarrería ya que se estaba desmontando sin ningún cuidado ni intención de conservación. Alertado Patrimonio Artístico por la ciudadanía y grupos ecologistas, se consiguió detener el destrozo y se han salvado 80 metros, que fue cedido al parque de Los Toruños. Recientemente se ha montado este tramo para su uso como carril bici y peatonal.